Las estafas más comunes a las aseguradoras que conllevan penas de cárcel

 

Las estafas cuestan a las compañías de seguros más de 500 millones de euros al año. También nos perjudican a los usuarios haciendo que las primas suban y que algunas indemnizaciones, como el famoso latigazo cervical, sean más difíciles de cobrar.

Sin embargo estos fraudes van en aumento. En España  las estafas a los seguros multiriesgo han aumentado un 8% en los últimos 4 años. Y en 2017 se dieron 166.000 intentos de engaño en los seguros de coche.

Si bien antes las estafas se cometían fingiendo accidentes o denunciando falsos robos, ahora la tendencia es simular daños personales, ya que las indemnizaciones son más altas. Los estafadores buscan nuevas formas de engañar ante cifras tan tentadoras como 70.000 euros por un tobillo fracturado o 6.000 euros por un esguince cervical.

Por ello, las aseguradoras y la Administración están trabajando para erradicar este problema que algunos llaman picaresca, pero que en realidad es un delito:

  • Hacer un falso parte amistoso es falsedad de documento mercantil y tiene una pena de entre 6 meses y 3 años de prisión, más multa.
  • Engañar al seguro con daños falsos, está recogido como delito de estafa por el artículo 248 del código penal, también con penas de cárcel y multa.
  • Llevar el fraude a juicio se consideraría estafa procesal, con penas muy similares.

Además las compañías aseguradoras colaboran entre ellas, cediéndose los datos de estas personas e incluyéndolas en “una lista negra”. Con lo cual estos estafadores no podrán contratar ningún seguro en el futuro.

La penas de cárcel en este tipo de estafas son más habituales de lo que pensamos. El pasado mes de mayo, la Audiencia de Sevilla condenó a tres hombres a más de dos años de prisión por simular un falso accidente de tráfico.